miércoles, 14 de junio de 2017

Divertirse hasta morir

A propósito de una nota de Martín Hopenhayn sobre el "imperativo de disfrutar", titulada ¡A gozar!;
Hay un libro clásico de Neil Postman, "Amusing ourselves to death" de 1985, en el cual habla de la necesidad de entretenimiento constante -placer narcisista, refuerzo positivo pavloviano- producto de la cultura de la imagen televisiva. (¡apágalo! ¡enciéndelo! no puedo seguir así, cantaban Soda Stereo en su canción Sobredosis de tv, curiosamente, también en los años ochenta). Lo importante es que la tesis de Postman, propia de los años previos a la posmodernidad, podría aplicarse lo más bien a nuestra época, tratando de disfrutar hasta morir, de cara a la pantalla en línea, a su goce y también a su abismo.

No hay comentarios.: